LA EPILEPSIA: SÍNTOMAS, CAUSAS Y RECOMENDACIONES PARA AYUDAR A UNA PERSONA QUE LO PADEZCA

La epilepsia ha sido históricamente estigmatizada en diversas culturas y sociedades en todo el mundo, principalmente debido a la falta de comprensión sobre su naturaleza y  la prevalencia de mitos. La neuróloga, la doctora María del Pilar Pozo, egresada de nuestra universidad, proporcionó valiosos insights sobre esta enfermedad cerebral crónica no transmisible, en el programa Tu salud en Cayetano+,  conducido por el doctor Leslie Soto.

El diagnóstico de epilepsia se establece cuando una persona experimenta al menos dos convulsiones no provocadas, separadas por un período de tiempo significativo, o cuando hay evidencia clínica o de pruebas médicas que sugieren un alto riesgo de futuras convulsiones.

“Esa convulsión es el evento que se manifiesta a través de sacudidas, pero también puede depender de la zona cerebral afectada. Ve y escucha cosas extrañas, así como también tiene sensaciones o se apaga como quedándose ido. Allí podemos decir que ese evento es la convulsión. Si esa situación se repite después a los tres meses, y ya son dos o tres eventos, a todo ese cuadro, le llamamos epilepsia”, explicó la doctora Pozo.

El diagnóstico de la epilepsia se caracteriza por la presencia recurrente de convulsiones no provocadas y se basa en la evaluación clínica, historial médico, estudios de neuroimagen y, en algunos casos, pruebas electrofisiológicas como el  electroencefalograma.

La doctora subrayó que experimentar una convulsión no implica automáticamente  tener epilepsia, pero es crucial buscar atención médica para identificar la causa subyacente y recibir el tratamiento adecuado, si es necesario. El diagnóstico y manejo de la epilepsia son responsabilidades de profesionales de la salud, como neurólogos y epileptólogos.

“Nosotros -los especialistas- para epilepsia en neurología nos basamos mucho en el evento inicial de la convulsión, la crisis como decimos nosotros, y el riesgo de recurrencia. Si no hay riesgo de recurrencia y es solo una convulsión, no siempre la tratamos, pero si ya hay alguien que se cae, golpea y hace momento de crisis, lo que hacemos es observar por tres o cuatro meses. Si esto ya no vuelve a ocurrir, probablemente ya no le damos (tratamiento), obviamente lo observamos y le damos los signos de alarma”, añadió la doctora Pozo.

Asimismo, aclaró que las convulsiones pueden ser causadas por diversos factores, como fiebre alta, lesiones cerebrales, infecciones, trastornos metabólicos, o el consumo de drogas y alcohol, entre otros.

Es importante que cualquier persona que experimente convulsiones o síntomas similares sea evaluada por un profesional de la salud para determinar la causa subyacente y recibir el tratamiento adecuado. El diagnóstico y el tratamiento oportunos pueden ayudar a controlar las convulsiones y mejorar la calidad de vida de las personas afectadas, enfatizó la doctora Pozo.

Recomendaciones que deben tenerse en cuenta para auxiliar a una persona con convulsión debido a la epilepsia:

  • Mantener la calma para poder ayudar de manera efectiva
  • Asegurar el entorno, retirando objetos cercanos que puedan causar lesiones durante la convulsión
  • Colocar almohadas o cualquier objeto suave debajo de la cabeza de la persona para prevenir lesiones
  • No restringir los movimientos de la persona durante la convulsión
  • Evitar introducir objetos en la boca, ya que esto puede causar lesiones
  • Colocar a la persona de lado para facilitar la respiración y prevenir la aspiración de saliva o vómito, después de que la convulsión haya terminado
  • Buscar ayuda médica de inmediato
  • Medir el tiempo de la convulsión, observando la hora de inicio y finalización, si es posible, para proporcionar información útil al médico que brinde atención posterior
  • Brindar apoyo emocional a la persona después de la convulsión, ya que puede estar confundida o asustada